Seguidores

jueves, 6 de diciembre de 2018

LA ODISEA DE LANZARSE AL MERCADO


Imagen relacionada

Es una larga carrera obstáculos con premio en la línea de meta

Quien decide poner en marcha una empresa sabe que debe asumir riesgos económicos y patrimoniales. Para obtener éxito--y rentabilidad-- es importante que el promotor tenga sentido común, capacidad de liderazgo, de comunicación y flexibilidad. El trabajo y la ambición, harán el resto.

En la fase incial de la creación de la empresa se suelen plantear múltiples dudas que van desde la definición del negocio, hasta la forma de ponerlo en práctica: la forma jurídica más adecuada, los tramites administrativos, posibilidades de financiación, obligaciones a las que la empresa tendrá que hacer frente. Lo más cómodo es ponerlo todo en manos de un gestor. Si no, las Cámaras de Comercio, editan guias had hoc en la que se explican detalladamente cuáles son los pases a seguir.

La idea que alumbra la nueva empresa no siempre tiene que ser novedosa. Muchas veces depende de encontrar um nicho de mercado en un momento oportuno. Después es necesario elaborar un plan de viabilidad riguroso; desarrollar el concepto de la empresa, que tecnología se va a autilizar, recursos disponibles y obtenibles, etc.

Sólo cuando el plan de empresa demuestra que el proyecto es viable y factible se pueden poner en marcha los trámites para su creación.

Evitar problemas

Antes de constituir la empresa hay que estudiar que forma jurídica adoptará. Esta decisión debe estudiarse con detenimiento para evitar problemas futuros que afecten al normal desarrollo de la actividad.

Una vez superados los trámites administrativos, los expertos recomiendan poner cuidado en algunos aspectos. Por ejemplo, el control de la gestión. El empresario debe localizar las oportunidades de negocio, eliminar todo lo que resulte ineficaz, y reinvertir en la propia empresa.

Hacerse empresario, una solución al desempleo.

El sector privado es el motor del crecimiento económico, y de él parten la mayoría de las ofertas de empleo. Por eso hay que incremetar el número de empresas y su competitividasd, a la vez que se deben globalizar los conocimientos de los futuros empresaarios.

Expertos en formación y jóvenes empresarios mantienen que la solución del problema del desempleo, especialmente en el caso de los jóvenes, pasa por el fomento del autoempleo y la creación de empresas. Pero subrayan la necesidad de contar con la formación que responda a las necesidades de la empresa.

La experiencia nos ha demostardo que en los paises en los que las compañías de caracter público las que más se encargan de crear empleo, al final se genera poco; mientras que en las economías más dinámicas son las empresas privadas las que los crean, y es dónde acaban surgiendo más puestos de trabajo.

Pero no parece una tarea fácil crear empresas. En primer lugar, es necesario potenciar varios factores que favorezcan la aparición de nuevos empresarios. Entre estos factores es fundamental la garantía de un ambiente socio-politico adecuado.

También es necesario que las nuevas empresas se incorporen al mundo de las innovaciones tecnológicas. La innovación--incluso en el área de gestión-- es un punto a favor para ganar la batalla de la competitividad. Si además la empresa ofrece valor añadido y tiene una visión transnacional, el éxito está asegurado.

Pedro Rubio Domínguez

__________________________________________________________________

Para aumentar la competitividad de las empresas es necesario impartir una formación más adecuada.


INSTITUTO EUROPEO DE GESTIÓN EMPRESARIAL
Formación & Consultoría
Dpto. de Información de Programas
iege.formaciónyconsultoria@gmail.com
institutoeuropeodegestionempresarial.es.tl.
__________________________________________________



No hay comentarios:

Publicar un comentario